Не ви допада? Няма проблеми! При нас имате възможност за връщане в рамките на 30 дни
Няма да сбъркате с подаръчен ваучер. Получателят може да избере нещо от нашия асортимент с подаръчен ваучер.
30 дни за връщане на стоката
Karl-Joseph Zumbrunnen, fotógrafo austriaco con raíces galitzianas,viaja buscando sus orígenes a la Ucrania de los años noventa del siglo xx. Tras el derrumbe del imperio soviético, encuentra un estado en el que los desajustes por su nacimiento serpentean entre elnacionalismo, la nostalgia por los Habsburgo, la tentación del retorno al régimen anterior, el folklore y el embrutecimiento vulgar de unmercado sin control. Enamorado de su intérprete, viaja con ella a unantiguo observatorio, que, tras ser un centro de espionaje y uncomplejo deportivo soviético, es hoy un hotel en los Cárpatos. Allí,pasado y futuro se encuentran, y toda frontera geográfica pierdedefinición. El espíritu del poeta Bogdan-Igor Antónich levita entredirectores de cine, bailarinas de striptease, matones y un escritorperdulario, Artur Pepa. Feérico, entusiasta, magistral y torrencial,Andrujovich nos invita, desde un paisaje tan imaginario como preciso,a un bellísimo e irónico paseo geopoético por una Europa en la quetodavía planea la sombra de la Cripta de los Capuchinos.Karl-Joseph Zumbrunnen, fotógrafo austriaco con raíces galitzianas,viaja buscando sus orígenes a la Ucrania de los años noventa del siglo XX. Tras el derrumbe del imperio soviético, encuentra un estado en el que los desajustes por su nacimiento serpentean entre elnacionalismo, la nostalgia por los Habsburgo, la tentación del retorno al régimen anterior, el folklore y el embrutecimiento vulgar de unmercado sin control. Enamorado de su intérprete, viaja con ella a unantiguo observatorio, que, tras ser un centro de espionaje y uncomplejo deportivo soviético, es hoy un hotel en los Cárpatos. Allí,pasado y futuro se encuentran, y toda frontera geográfica pierdedefinición. El espíritu del poeta Bogdan-Igor Antónich levita entredirectores de cine, bailarinas de striptease, matones y un escritorperdulario, Artur Pepa. Feérico, entusiasta, magistral y torrencial,Andrujovich nos invita, desde un paisaje tan imaginario como preciso,a un bellísimo e irónico paseo geopoético por una Europa en la quetodavía planea la sombra de la Cripta de los Capuchinos.